4ª Quedada de Libertad Inmobiliaria Madrid

Igual te suena a chino eso de la quedada de libertad inmobiliaria. Acabas de conocer el mundo de las inversiones inmobiliarias y en tu circulo más cercano no te entienden. O igual tienes más experiencia, pero no tienes contactos de otros inversores. Sea por el motivo que sea, es muy posible que te surja la necesidad de quedar con otros inversores inmobiliarios y compartir conocimiento, lo que se conoce como networking inmobiliario.

En Madrid tenemos un grupo de inversores privados que organizamos quedadas. Hemos realizado ya la cuarta el pasado 16 de julio. La gente de la organización tiene ya bastante experiencia y han ido incorporando y mejorando cosas. Yo me he sumado a la organización en esta última y el trabajo que realizan es alucinante y poco perceptible desde fuera.

Se trata de un grupo privado y la asistencia es únicamente para alumnos de la formación de Libertad Inmobiliaria de Carlos Galán. En este post quiero contarte como fue el desarrollo de la quedada y compartir algunas fotos. Me gustaría animar a la gente a conocer a otros inversores y compartir conocimiento.

Historia de la “Quedada de Libertad Inmobiliaria” Madrid

Como digo tuvimos una quedada el pasado fin de semana, la cuarta. Empezamos en el 2021 y este año ya se empiezan a hacer recurrentes, bajo el paraguas de Carlos. Esto significa que tienen cierta periodicidad, son predecibles y esto da una facilidad a que no suponga un gran problema el no asistir a una quedada en concreto. Mejor hacer muchas reuniones pequeñas, que un evento grande donde se pierde parte del networking y se masifica.

Al final todos tenemos compromisos fuera de la inversión y no podemos hacer el evento del siglo. Queremos juntar muchos pequeños buenos momentos y que quien quiera se sume. Qué no pierdas la oportunidad por no haber estado disponible en un día concreto.

El haber tenido ya cuatro ediciones permite ir incorporando y mejorando cosas. Podemos decir con orgullo que es la única quedada de inversores con networking en mesas rotativas. Lo cual permite conocer al máximo número de inversores.

Detrás de todo esto hay un grupo de personas que voluntariamente ceden su tiempo para que todo salga lo mejor posible. Realizan un trabajo extraordinario y a veces poco perceptible. Hasta el más mínimo detalle está pensado.

Quedada de Inversores Inmobiliarios

Y entro en materia ya que en este post quería hablar de una quedada en particular. La que hemos tenido este fin de semana. Me gustaría contaros como fue para que los que estuvieron compartan un espacio y puedan incluso ver alguna foto. Y animar a los que no, bien asistiendo a la próxima si son alumnos de Libertad Inmobiliaria, o asociandose por su cuenta y participando en otros eventos. Esto no es un post promocional, es un post motivacional para que compartas momentos con otros inversores.

Al final no hizo tanto calor como el que yo esperaba. Es lo bueno de esperar estar en el infierno. A mediados de julio a las 5 de la tarde, en la terraza de un bar y en plena ola de calor, me asusté. No sabía cuantos se atreverían a venir, pero sabía que mi amiga Mentxu, en estado de buena esperanza, se acercaría. David me dijo que igual se acercaba con su hija. En fin, que si a alguien le da un golpe de calor me da algo. No era posible por temas de espacio mover la hora del evento ¿Cómo intentamos minimizar riesgos?

Esa misma semana me acerqué a Cobo Calleja a comprar unos pai- pai con la esperanza de que aguantasen las tres horas del evento. Alguno resistió el networking inmobiliario, pero creo que poquitos llegaron hasta el final. Además, creo que con acierto obligamos a la gente a consumir bebidas. Por 10 euros tenían derecho a tres consumiciones y todo el mundo debía pagar. Pensamos un sistema de tickets para agilizar el pago de las consumiciones con el bar y que fuese muy dinámico y sencillo para el bar y para la organización.

¿Qué hicimos?

Al final casi 50 personas nos acercamos al evento, que no está nada mal. Es agradable encontrarse con amigos y a la vez ver caras nuevas. Se nota que las nuevas ediciones vienen pisando fuerte.

Empezamos con la charla del invitado sorpresa. José, una persona anónima, como tantas otras, pero que ha comprado 10 pisos en Madrid en apenas año y medio. Fue una charla donde nos contó sus inicios en la inversión inmobiliaria y nos desarrolló las operaciones más interesantes. Hablamos de la mentalidad del inversor, sobre todo para enfrentarse a los obstáculos que tarde o temprano te encuentras en el camino.

Cuando empecé en la inversión inmobiliaria creía que lo más importante era el dinero del que disponías y conforme ha pasado el tiempo he conocido a personas que tienen dinero no invierten, seguro que también conoces a alguien, y otros que sin dinero o con poco, han hecho maravillas. Es por esto que ahora mismo no me cabe ninguna duda de que es lo más importante en la inversión, y a lo que más partido le vas a sacar en la vida en general… la mentalidad.

José es una persona muy fuerte, con una mentalidad clara y decidido. Es un chico muy formado. Muy humilde al charlar sobre errores o situaciones que había tenido muy embarazosas en las inversiones. Y es que esto no es un camino de rosas y una buena mentalidad es lo que te va a hacer llegar a la meta o fracasar.

Después del invitado sorpresa organizamos nuestras mesas calientes. La clásica mezcla de gente más experta con más novatos que hace que se creen buenas conversaciones. He estado en bastantes quedadas de inversores y tienen fundamentalmente un problema y es que se limitan a relacionarte con quien tu buenamente puedas. Si estas sentado, estático pq sea una comida/cena, con quien tengas en tu cercanía. Si son eventos de pie, con quien puedas acercarte a conocer. Nosotros queremos que la gente se conozca y les “obligamos” a interactuar, generando conversación inmobiliaria y con turnos de 30 minutos, después, cambio de mesa.

Sin duda las sillas/mesas calientes es la mejor forma de hacer networking inmobiliario y es uno de los motivos por los que en todas las quedadas nos felicitan.

Una vez finalizado los diferentes turnos dimos por concluida la quedada de forma oficial. Sin embargo, al estar en espacio de un restaurante abierto al publico, no teníamos límite de horas contratado y no fueron pocos los que siguieron hablando entre ellos en un networking más convencional, pero en el que ya nos conocíamos todos y se había roto el hielo.

Como colofón quien quiso se pudo quedar a la cena. Eramos ya poquitos, unos 10 pero es el momento más personal en el que incluso se puede hablar de otros temas, no todo va a ser inmobiliario. E incluso más tarde nos fuimos Juanma, Laura, Rocío y yo a tomar una pepsicola aprovechando que teníamos a la niña con los abuelos.

Conclusiones

Estas son las quedadas que organizamos que se han convertido en reuniones de amigos. Ya nos conocemos los más veteranos y casa vez estamos más a gusto hablando. Nos ponemos al día de nuestras inversiones y nos motivamos unos a otros. Lo pasamos muy bien y por supuesto nos quedamos con ganas de repetir.

Se que muchos no pudieron asistir, alguno por imprevistos de bebes 😉 , pero se que a la próxima harán lo imposible por estar.

¿Estuviste en la quedada? Gracias por venir. Déjame algún comentario y me cuentas que te pareció.